Al más puro estilo del viejo oeste, unos bandoleros se las dieron de forajidos con carabineros, causando una balacera que dejó saltones a todos los calameños.
Una trama de película
El pasado martes 18 de abril, cuando faltaban minutos para las 22:00 horas de la noche, llegó un caballo-auto blanco hasta la comisaría de Calama. Los tipos en su interior, que al parecer habían visto muchas películas de cowboy, emprendieron fuego en contra del cuartel policial.
Los carabineros que no tenían el modo “sheriff” activado no cachaban que estaba pasando, así que solo atinaron a resguardarse, mientras que dos de las personas que estaban en el recinto terminaron baleadas.
Por culpa de los forajidos
Uno de los heridos en el tiroteo estaba en el lugar esperando para poner una denuncia. Al pobre le habían robado su caballo-auto y fue en busca de justicia.
Mientras esperaba que lo atendieran, llegaron los pistoleros y terminó con un balazo en la cabeza.
Por su parte, una mujer Boliviana residente en Chile, que fue a dejarle unas cositas a su retoño que estaba en cana, corrió la misma suerte. La pobre recibió dos balazos en las piernas.
Si bien las heridas no fueron de gravedad, los dos pasaron la peor noche de sus vidas por culpa de los forajidos.
Los Cowboys andaban como locos
Los cowboys a esas alturas andaban como locos, así que se fueron hacia el terminal de buses de la ciudad.
Mientras los dueños de locales cerraban puertas y ventanas para esconderse dentro de barriles, los malditos se pusieron a disparar de nuevo en las afueras del recinto.
En el lugar murió un veneco que estaba trabajando honradamente como conductor de una aplicación, mientras que otros tres terminaron como colador.
Los pobrecitos que estaban irregulares terminaron tan mal heridos, que no les quedó otra que ir al hospital.
El jovencito de la película
Con toda la embarrada que había en la ciudad, los carabineros salieron en masa a buscar a los bandoleros calameños.
Detectaron la presencia del caballo-auto blanco sospechoso y cuando lo fueron a controlar, el único ocupante en su interior quiso librar y se dio a la fuga.
Lo carabineros que ya estaban modo sheriff activado salieron detrás del forajido. El bandido no supo controlar el caballo-auto porque no tenía riendas y terminó chocando con un móvil policial.
En todo este despelote, uno de los carabineros desenfundó su arma. A lo Clint Eastwood con mirada profunda se acomodó el quepi y con una bala de plata terminó los días del forajido.
Sin Dios ni ley
El alcalde de Calama Eliecer Chamorro que ya está chato de vivir en una ciudad sin Dios ni ley, anunció el paro total de la ciudad de Calama desde las 09:00 horas de este viernes 21 de abril, para solicitar mayor seguridad.
