Todo hacía presagiar que equipo tendría que morder el polvo de la derrota y mascar la rabia de la frustración. Y no era para menos, porque comenzaron perdiendo el partido, cuando a los 23′ del primer tiempo el portero debió ir a buscar la redondita al fondo del arco para ver qué se podía hacer en los restantes 67 minutos restantes.
Y siguió la lucha sin claudicar, hasta que en el 78′ el Pato Rubio descartuchó al equipo en la competencia, al marcar el primer gol y reavivar las ganas de seguir en la Copa Libertadores de América. Nada mal para ser la primera vez que Ñublense participa en el torneo continental.
El partido terminaba y parecía que los locales se conformaban con el resultado frente al Aucas.
Pero no. Cuando se jugaba el segundo minuto de adición, Andrés Vilches (sí, el mismo que jugó en el Colo), se mandó flor de finta y se pegó un remate que levantó a la hinchada local de sus asientos… Pero el VAR decidió revisar el tanto… El suspenso se instaló en el “Ester Roa Rebolledo”. 2-1
El VAR estaba puro web… y validó la conquista, y le dio la esperanza al equipo rojo para seguir bregando en los próximo tres partidos, con el objetivo de seguir avanzando en el torneo…
Pero… pero… ¿Y el Colo…?
¿Colo Colo…? Bueno, esa es otra historia… Una fea historia. Una derrota por 0 a 2, “La Joya” expulsada, y la falta de gol (otra vez) le pena como fantasma solitario. Los primeros minutos los albos fueron una tromba, y el “Chiquito” Romero -sí, el mismo de la Copa América-, impidió que los locales abrieran el marcador.
Y el Cacique pudo perfectamente ganar el partido pero no la embocan ni con el arco sin portero. Y eso sucedió hasta que el perucho Advíncula se mandó la primera pepa, con un tiro que dio una comba que dejó al “Tuto” De Paul sin ninguna opción. 0-1
El ranazo
De ahí en más, los argentos hicieron su juego, es decir, esperando al Colo y saliendo de contragolpe, y los albos comenzaron a desesperarse. Se fueron al descanso en desventaja y no se veía cómo ni por dónde.
Llegó el minuto 65 y el Peluca, por tratar de salir jugando, se le soltó el balón, tenía a un argentino pegado, que le quitó la pelota, centró y Sebastián Villa nos puso la lápida. El ranazo del defensa desmoronó al equipo. 0-2
Pa’ más remate…
Pa’ más cag… eeeehhh embarrarla, tal era la frustración entre los jugadores albos, que la Joya le mandó flor de chuleta a un rival, y el pito brasileño Raphael Claus ni la dudó: Rogelia, y a las duchas. (Es que no podíiiii).
La expulsión de Carlos Palacios, de buen desempeño y alabado por la transmisión, se sumó a las amarillas de Falcón, Fuentes, Gutiérrez y Bouzat… Ah y Quinteros. Todo mal, cabritos…
Ahora, Colo Colo deberá viajar hasta Venezuela para el partido de vuelta con Monagas, el 23 de mayo, y ver si recupera terreno y logra asegurar el paso a la siguiente ronda… Pero si siguen con el mismo juego, no queda más que hacerse moñitos y ver si logra ganar el campeonato para ir de nuevo a la Libertadores…
